Protegidos por la virgen María de la consolación es que funcionarios comenzaron el peregrinar dentro del parque de Quinta normal, en donde cada establecimiento iba identificado. Los cantos, oraciones y reflexiones amenizaron la caminata hasta llegar la gruta de la virgen de Lurdes, en donde se celebró la eucaristía en donde cada establecimiento entrego ofrendas de alimentos no perecibles los que irán en ayuda de los más desposeído.